La última revolución para el cuidado de la piel es, sin duda, el rodillo de jade. ¿Por qué? Porque ayuda a estimular los músculos y la piel.
Las piedras de jade, un mineral resistente y duro, tiene múltiples beneficios que cada día tiene más adeptos, tales como Cindy Crawford o Meghan Markle como grades seguidoras de este protocolo.
Además de relajar los músculos faciales, estimula el sistema circulatorio y reduce notablemente las arrugas. Gracias a la relajación que le suministra al rostro, la piel luce mucho más fresca y rejuvenecida.
Productos complementarios:
Sus beneficios
- Mejora la circulación facial porque actúa como un pequeño masaje que hace que la musculatura del rostro se desbloquee.
- Proporciona una sensación relajante en la piel, aliviando dolores musculares y de cabeza, aportando mayor elasticidad en piel.
- Es un gran aliado para desinflamar las ojeras gracias al drenaje linfático que aporta el paso del rodillo.
- Combate las arrugas al eliminar toxinas acumuladas en el rostro, lo que ralentiza el proceso de envejecimiento de la piel.
- Favorece la eliminación de toxinas
¿Cómo se utiliza?
Además de tener la piel perfectamente limpia antes de utilizar el rodillo de jade, este mineral tiene que estar limpio y a temperatura fresca. Por ello, es recomendable guardarlo en la nevera para su posterior utilización.
Después aplicamos un aceite facial en la frente, pómulos y en ambos lados del mentón para comenzar a realizar los movimientos, siempre ascendentes, primero un lateral y luego el otro, y presionando ligeramente. Las zonas que debemos tratar son la supraclavicular, el cuello y la cara con una duración aproximada de 10 minutos por sesión. Una vez finalizado, hidratamos el rostro con la crema y el contorno de ojos habitual.