El famoso cómico y la icónica influencer han confirmado su relación tras semanas de rumores que ya eran casi una evidencia. Davidson siempre ha sido un reclamo para muchas marcas por si carisma profesional y personal, pero también por su larga currículo amoroso que ahora se consagra con Kim Kardashian.
Su pelo, que fluctúa entre el azul, el castaño o el rubio, es también ya una reconocida seña de identidad como cuando en 2018 visitó un importante salón en Nueva York para apostar por un tono que él mismo denominó en sus redes #skybluehair
Sus cambios de looks son muy apreciados por los medios porque siempre regala múltiples imágenes que ya forman parte de su impacto mediático y ahora, con esta nueva relación, seguro que aún más. Davidson, que ahora luce un cabello corto que no roza el tono platino pero que sí un grisáceo muy cercano al rubio que está muy de moda entre sus fieles seguidores, aseguraba en una entrevista a la revista americana Allure que, aunque no lo parezca, solía cuidar mucho su pelo acudiendo a profesionales porque “mi trabajo es el peor enemigo de mi pelo. Paso horas bajo los focos y noto como se daña porque, además, me gusta cambiar el tono y llevarlo algo despeinado”.
No es un look que todo el mundo pueda llevar porque a Davidson le gusta jugar con eso, pero también es alguien con unas facciones muy marcadas y un rostro que resulta cercano y muy divertido. Digamos que es alguien que se puede permitir sus cambios de look sin despertar críticas negativas porque sabe cómo defenderlo y eso no muchos chicos de su edad lo pueden decir. Veremos si su evolución estilística le convierte en un icono -que ya lo es para muchos millones de personas- de belleza masculina como su nueva novia Kim Kardashian.
